En cualquier proyecto de diseño gráfico, la elección de los colores es una decisión fundamental. Los diseñadores gráficos deben acertar en los colores y en su combinación cuando trabajan en la creación de un logo, una página web o un cartel. En este artículo vamos a explicarte cómo elegir una paleta de colores adecuada para que tus diseños tengan la máxima calidad.
¿Qué es una paleta de colores en diseño gráfico?
La paleta de colores es el conjunto de colores y tonalidades que un diseñador gráfico elige para decorar un proyecto gráfico. Los colores son un componente esencial en toda obra gráfica y su presencia y combinación producen en el espectador unas sensaciones concretas. El diseñador gráfico debe escoger los colores en función de los objetivos específicos que le ha marcado el briefing. Por ejemplo, sugerir calma, atraer a un público infantil o transmitir seguridad.
Una paleta de colores debe estar formada por una selección de colores que armonicen, es decir, que combinen por la similitud de sus tonos. Para los más inexpertos, el tono, (también conocido como matiz o tonalidad) de un color es el estado puro de ese color, es decir, sin mezcla de blanco o negro. El tono es la característica principal de un color y junto a la luminosidad y la saturación son las tres características psicofísicas del color.
La saturación es la pureza de un color. Un color muy saturado es un color muy intenso, mientras que un color poco saturado es un color muy apagado, descolorido.
La luminosidad se refiere a la cantidad de luz que está presente en un color. Cuanto más claro es un color, mayor será su luminosidad. Y cuanto más oscuro, menor es la luminosidad. En el siguiente ejemplo puedes observar diferentes grados de luminosidad de un color.
¿Por qué el diseñador gráfico necesita una paleta de colores?
Todo diseñador gráfico debe estar familiarizado con la psicología del color. Según esta disciplina, los colores influyen en el estado de ánimo y en la conducta de las personas. Por esa razón, el conocimiento de este área de la psicología permite a los diseñadores gráficos provocar unas sensaciones determinadas y alterar la percepción de la realidad en busca de unos objetivos deseados. Por ejemplo, el color azul produce emociones como calma, serenidad, relajación o tranquilidad. Sin embargo, el color amarillo se asocia con alegría, felicidad, optimismo o creatividad. Asimismo los colores claros provocan la sensación de espacios más amplios y los oscuros de espacios más reducidos. Conocer las emociones y sensaciones que despiertan los colores permite a los diseñadores gráficos influir sobre las personas a las que dirigen sus diseños y alcanzar con más facilidad los objetivos fijados por el cliente en el briefing. Por esa razón es muy importante elegir adecuadamente una paleta de colores. Además, una paleta de colores ayuda al diseñador gráfico a reforzar la identidad visual de las marcas. Por ejemplo, si estamos trabajando en un proyecto para Movistar deberemos tener en cuenta sus colores corporativos (azul y verde) y además no deberíamos utilizar los colores asociados a sus competidores, como el naranja de Orange o el rojo de Vodafone.
La influencia de los colores también obedece a razones culturales o religiosas. Por ejemplo, en el mundo occidental, el negro es el color del luto. La razón estriba en su asociación con la oscuridad de la muerte. Sin embargo, en muchas culturas orientales, como Japón, China o India, el color que se utiliza en ceremonias funerarias es el blanco, porque se asocia con la pureza del alma. En Sudáfrica, el color que representa el luto es el rojo, porque simboliza la sangre del fallecido. Y en Tailandia, se usa el violeta; y en México, el azul cielo… Como vemos, los colores dicen mucho de la cultura de un país y de su cosmovisión del mundo.
La rueda cromática: un recurso muy útil para el diseñador gráfico
La rueda cromática, rueda de colores o círculo cromático, es una representación circular de los colores que están ordenados según su tono. Para los diseñadores gráficos, es un instrumento muy útil para elegir los colores de su paleta cromática con armonía.
Desde un punto de vista técnico, la rueda cromática es un círculo formado por 6 colores (púrpura, rojo, amarillo, verde, azul cian y azul oscuro). Estos 6 colores se muestran reflejados en la descomposición de la luz con respecto al espectro solar y por eso pueden verse sus variaciones en función de la intensidad de los tonos. En la rueda cromática pueden apreciarse hasta 12 alternativas de colores.
¿Cómo se clasifican los colores en la rueda cromática?
La rueda cromática muestra los 3 colores primarios (rojo, amarillo y azul), que son los tres colores que reconocemos cuando la luz llega a nuestros globos oculares. Además, la rueda cromática contiene los colores secundarios (verde, azul cian y púrpura), y los terciarios, que se producen con la mezcla de los colores básicos. Por eso en la rueda cromática aparecen 6 colores, que llegan a ser 12 cuando incluimos los terciarios.
Los colores que aparecen en la rueda cromática se dividen en dos grupos: cálidos y fríos. Los colores cálidos, que se asocian al calor y el fuego y transmiten energía y movimiento, están localizados en la mitad superior del círculo que forma nuestra rueda cromática. Son, por ejemplo, el amarillo, el naranja o el rosa. Por otra parte, los colores fríos se relacionan con la naturaleza y sugieren serenidad y paz. Se encuentran en la mitad inferior de la rueda cromática. Entre ellos se encuentran el azul y el verde.
Tres tipos de paletas de colores para el diseñador gráfico
Las combinaciones para crear una paleta de colores son prácticamente infinitas. Sin embargo, existen tres tipos de paletas base que simplifican las decisiones de los diseñadores gráficos. Son la paleta cromática, la paleta análoga y la paleta monocromática. Veamos las tres una por una.
Paleta de colores complementaria
Se trata de una paleta formada por una combinación de colores complementarios. Para que los reconozcas con facilidad, son los colores que se encuentran más alejados en la rueda cromática. Por ejemplo, el azul y el naranja. O el rojo y el verde. Para algunos diseñadores gráficos, esta paleta es arriesgada porque genera un fuerte contraste, pero lo cierto es que también provoca un gran impacto visual. Asimismo, una paleta de colores complementaria crea una jerarquía clara, dando mayor protagonismo a un color, el más fuerte.
Paleta de colores análoga
Es una paleta que utiliza colores que se encuentran muy próximos en la rueda cromática. En este caso, los colores se mezclan armónicamente y combinan a la perfección. Por ejemplo, el amarillo y el naranja. O el azul y el morado. Se trata de una paleta que los diseñadores utilizan con frecuencia para crear composiciones serenas y sutiles.
Paleta monocromática
Esta paleta de colores utiliza solamente un color, junto con los diferentes tonos, tanto oscuros como claros, de ese color. Por ejemplo, el verde y todos sus tonos. Se usa sobre todo cuando el diseñador gráfico busca una combinación muy suave para crear emociones asociadas a la elegancia y la sobriedad.
Como puedes ver, elegir colores en diseño gráfico no es tarea fácil. No basta con la creatividad. Hacen falta unos conocimientos técnicos que refuerzan el talento de los diseñadores gráficos y facilitan su trabajo para encontrar soluciones a los retos que plantean los clientes. Si quieres saber más sobre diseño gráfico, publicidad o marketing digital, infórmate de nuestros Masters. En Aula Creactiva podemos ayudarte a impulsar tu carrera profesional para que des rienda suelta a tu creatividad y puedas encontrar trabajo en un sector que te apasiona.